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A 26 años de que saliera del poder, el doctor Joaquín Balaguer, el último de los caudillos ilustrados que gobernó la Nación,   comienza el cierre del ciclo post caudillismo ilustrado que se inicio con la llegada de  Leonel Fernández al poder en 1996, seguido por Hipólito Mejía y Danilo Medina.

Ya los expresidentes Hipólito Mejía y Danilo Medina declinaron de la aspiración de retornar a la presidencia de la República. El expresidente Leonel Fernández, quien gobernó 12 años de los 26 del ciclo post caudillismo ilustrado todavía esta puesto en la escena electoral en procura de retornar, pero su aspiración luce cada día más un sin sentido de la historia.

La llegada de Luis Abinader al poder en 2020, es el inicio de un nuevo ciclo que pone el escenario fértil para liderazgos jóvenes con una visión de futuro mas acorde con la sociedad post covid 19. Se construye un nuevo cerebro y corazón social, una nueva mentalidad y conducta social que es terreno árido para los expresidentes y fértil para liderazgos jóvenes que hagan empatía con los sueños, esperanzas frustraciones y demandas de la juventud en esta atmosfera de anti política y desafección.

La escogencia de Abel Martínez como candidato presidencial del PLD frisa el crecimiento de Leonel Fernández y le quitará dirigentes a su otrora líder. 

Hay varios diputados y exdiputados de la Fuerza del Pueblo que tienen relaciones primarias con Abel Martínez y que no tardarán en ponerse a su lado.

La escogencia de Abel Martínez le quita razón de ser a la candidatura de  Leonel Fernández. 

Leonel no podrá atacar a Abel, porque es su discípulo, su hijo político, y el joven santiaguero aprovechara esa ventaja para «comerle los caramelos».

Abel Martinez concita altos niveles de agrado entre los seguidores de Leonel Fernandez, y si este arranca con fuerza y se posiciona como el rival que le dara la pelea al oficialismo, le daran el voto, aunque Leonel este en la boleta.

Con la elección de Abel Martínez, el PLD consolida el liderazgo de la oposición y el escenario 2024 inicia a partir de este momento una ruta hacia la polarización PRM versus PLD.

Los dirigentes de la Fuerza del Pueblo volverán al PLD como sucedió con los seguidores de Jacobo Majluta organizados en el PRI que retornaron al PRD, los de Fernando Álvarez Bogaert organizados en la UD que retornaron al PRD y los del PRD que se fueron al PRM. En el 2015  al PRD le cambiaron el nombre por PRM, porque mas del 80 por ciento de la dirigencia se fue con el nuevo proyecto encabezado por Hipólito Mejía y Luis Abinader, y alrededor del 15 por ciento de los que se quedaron con Miguel Vargas Maldonado, pronto lo dejaron solo.

La perspectiva es que la FP pacte con el PLD en las elecciones municipales a celebrarse en febrero 2024 y ahí se abrirá el proceso de la fusión.

Pienso que la elección de  Abel Martínez como candidato del PLD y la perspectiva de que el joven santiaguero encabece el bloque opositor hará que Luis Abinader medite sobre una postulación en el 2024.

El presidente Luis Abinader solo buscara la reeleccion si percibe un escenario que le de triunfo seguro. 

En caso de que el presidente Abinader no tenga el escenario a su favor, entonces podria aupar a David Collado para que la batalla electoral se libre entre dos liderazgos de la misma generación.

El proyecto reelección de Luis Abinader tiene un nudo que cada día se le hace más difícil de desatar, y es que gobierna en crisis y contingencias, no ha podido poner en marcha el programa de gobierno que prometió en la campaña electoral 2020, pero tampoco, la situación le ha permitido cumplir con quienes lo financiaron. 

Una campaña reeleccionista no se apoya en promesas, se construye sobre la base de la satisfacción social por el desempeño y el reparto. Todo parece indicar que el Estado le queda pequeño al PRM, quizás por eso no han cedido espacios a los aliados como lo hacia el PLD.

La presentación de candidatos jóvenes es una oportunidad que se presenta para fortalecer la legitimidad de la partidocracia, porque estos son mas atractivos para la juventud y el segmento independiente del electorado.

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